Antipsicóticos y Autismo: ¿Medicamos por protocolo o necesidad?

1
Un enfoque de arriba hacia abajo de los efectos secundarios de medicamentos. Imágen: Miquel Duran-Frigola, Patrick Aloy

El debate sobre si el uso de antipsicóticos en niños con Autismo es válido o no, no ha bajado de intensidad en los últimos años. Mi postura hacia el uso de este tipo de fármacos como un sistema de intervención en el autismo ha sido siempre extremadamente crítica, me he declarado abiertamente en contra, habida cuenta de que en este aspecto habían (y siguen habiendo), en mi opinión, excesivas lagunas. También es cierto que el uso de este tipo de medicamentos en niños con autismo están siendo duramente cuestionado desde hace tiempo por un gran grupo de especialistas. Existe información profusa en la literatura científica que nos viene alertando de la gran cantidad de riesgos que este tipo de fármacos tienen en su uso pediátrico. Y raro es el estudio, incluso aquellos algo más acorde al discurso de la BigPharma, que no muestren una larga lista de los efectos adversos de este tipo de fármacos en la administración a la población infantil. Incluso la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) alertaba el 5 de diciembre del 2011 sobre el uso de la Atomoxetina (Strattera), no olvidemos los importantes vínculos de la AEMPS con las empresas farmacéuticas, ya que es la agencia que precisamente vela por la calidad de los fármacos autorizados en España.

Uno de los aspectos más preocupantes es la gran cantidad de efectos secundarios que este tipo de fármacos producen en los niños, y sin embargo han recibido el plácet de las agencias sanitarias de diferentes países. Uno podría preguntarse si un fármaco que produce efectos adversos en más del 15% de quienes lo toman en los ensayos previos sería aprobado como un fármaco “seguro”. Aunque aquí deberemos aclarar que por motivos éticos y de seguridad, en los estudios se excluyen a niños, ancianos o mujeres embarazadas. Lo curioso es que un fármaco que no se ha estudiado en niños por seguridad y ética, luego se les administre sin miedo a la seguridad o a romper la ética. No deja de ser paradójico que en pro de la seguridad no se evalúe un fármaco en niños desconociendo por tanto las características o efectos farmacocinéticos o farmacodinámicos que este mismo fármaco va a producir precisamente en quienes acabaran siendo los consumidores de estos fármacos. A consecuencia de este espinoso asunto a partir de enero del 2008 la Agencia del Medicamento Europea (EMEA), obligó a las farmacéuticas a realizar ensayos clínicos en menores, a fin de reducir el uso no aprobado de estos fármacos y siendo sólo aprobados para uso infantil y adolescente las que tratan la esquizofrenia y el trastorno bipolar. Curiosa exclusión de los ensayos por cierto.

Durante el 21 Congreso del Colegio Europeo de Neuropsicofarmacología (ECNP), celebrado en Barcelona en el 2008, especialistas de la unidad de Psiquiatría de adolescentes del Hospital General Universitario Gregorio Marañón presentaron los resultados de dos estudios realizados sobre efectos secundarios de los antipsicóticos en niños y adolescentes. “Donde un antipsicótico efectivo y bien tolerado mostraba una mejoría sintomatológica en algunos trastornos mentales modificando el curso actual de la patología asociada, pero sin embargo niños y adolescentes parecen presentar un mayor riesgo que los adultos de sufrir efectos adversos como síntomas extrapiramidades, elevación de la prolactina, sedación, aumento de peso y efectos metabólicos cuando se les somete a un tratamiento con antipsicóticos”. Es importante destacar lo de antipsicótico efectivo y bien tolerado, es decir, que no presente efectos secundarios, o que estos sean mucho menores que los beneficios. Obviamente, en farmacología en general, dudo soberanamente que se permita el uso de un fármaco para el tratamiento de la bronquitis (por poner un ejemplo) que presente un nivel de reacciones adversas en las cifras que sucede con los antipsicóticos.

Pero para aumentar más la información, acaba de ser publicado un estudio en The Journal of Pediatrics que trata precisamente el aspecto de la administración de medicamentos de tipo psicotrópico en los EE.UU.. Este estudio de tipo observacional retrospectivo, se basó en información de 2001 a 2009, y entre otros muchos e interesantes datos, nos aporta uno muy relevante, y es que de una revisión de 33.565 niños con un diagnóstico de TEA, el 64% recibió al menos un fármaco psicotrópico, el 35% usaba 2 tipos combinados y el 15% usaba 3 tipos o más de fármacos combinados. Siendo el tiempo medio de administración de fármacos combinados de 346 días. Y por supuesto, en caso de la existencia de comorbilidades (Déficit de atención, ansiedad, depresión, trastorno bipolar,…) la probabilidad de usar psicotrópicos o una combinación de fármacos aumenta de forma considerable.

Pero además, este estudio arroja datos que pueden ser comparados con otros factores que tienen que ver con la calidad de vida de una persona con TEA. Por ejemplo, los estados del Sur tienen a recetar más medicamentos que las zonas del Oeste o Noroeste, y curiosamente coincide con que en el Sur hay menos servicios de atención temprana y psicoeducativa. ¿Se suplen las carencias atencionales con fármacos? En Autismo Diario hemos abordado muchas veces este aspecto, sobre la protocolización en la administración de un fármaco, de forma que ante un diagnóstico determinado damos un fármaco determinado. Aunque realmente nadie ha conseguido demostrar si estos fármacos consiguen realmente resolver los problemas de comunicación o los déficits sensoriales que se pueden presentar (por citar solo un par). Existía la creencia de que todos los problemas del autismo estaban relacionados con procesos de irritabilidad y por tanto era posible tratarlos con fármacos. Hoy sabemos que esto no es siempre así. Se cita en el mismo estudio que precisamente una de las mayores preocupaciones son la falta de pruebas que demuestren la seguridad y/o eficacia del tratamiento farmacológico del autismo en la infancia, así como no se conoce con exactitud cómo estos fármacos van a incidir en el cerebro en formación de un niño o del cuerpo del mismo, desconociéndose la vulnerabilidad a las influencias ambientales o biológicas.

El resto de datos no dejan de ser preocupantes en cuanto a los rangos de edad, donde niños de menos de 6 años han recibido este tipo de medicamentos, e incluso en la franja de dos años de edad. Medicamentos generalmente destinados a combatir la irritabilidad (La FDA solo aprueba el uso para los TEA de risperidona y aripiprazol) han resultado no ser útiles realmente en todos los casos. Muchos profesionales de la intervención del autismo cada vez se muestran mas disconformes a la hora de trabajar con niños medicados, ya sea porque realmente los antipsicóticos no son la solución al problema conductual o bien porque el fármaco produce el efecto contrario al deseado o ya que los efectos secundarios son difíciles de poder gestionar. E incluso porque el efecto de los fármacos puede alterar la percepción del niño, siendo un freno a la adquisición natural del niño de nuevas habilidades y conocimientos. También sabemos que una gran parte de las conductas problemáticas tienen un origen basado en problemas asociados a una mala comunicación o a desordenes sensoriales o a un mal estado de salud, o a un combinado de todos los anteriores. Evidentemente si un niño tiene estreñimiento, por muchos antipsicóticos que le demos seguirá teniendo un alto nivel de irritabilidad. Habrá pues que resolver el origen del problema (En este caso el estreñimiento) para eliminar la irritabilidad.

Es importante tener en cuenta que administrar antipsicóticos a un niño debe realizarse con el consentimiento informado de las familias y con un acuerdo llevado a cabo entre los familiares, el equipo de intervención terapéutica y el prescriptor del medicamento (Sea este un paidopsiquiatra, neuropediatra, neurólogo,…). De forma que se lleve un control riguroso de la administración de un fármaco, se evalúe el riesgo/beneficio y por supuesto, el fármaco se use como un coadyuvante a una determinada terapia. En casos muy extremos un fármaco bien tolerado y que demuestre su eficacia puede ser útil.

Recomiendo efusivamente la lectura del estudio motivo de este artículo Psychotropic Medication Use and Polypharmacy in Children With Autism Spectrum Disorders(En inglés y de libre acceso) a quienes en su práctica médica diaria prescriben este tipo de fármacos a población pediátrica. Y si desean conocer más sobre los efectos adversos de los medicamentos pueden leer el estudio “Analysis of chemical and biological features yields mechanistic insights into drug side effects” (En inglés y de libre acceso), que les aportará una muy interesante información sobre efectos adversos y farmacovigilancia.

Bibliografía:

  1. Psychotropic Medication Use and Polypharmacy in Children With Autism Spectrum Disorders. Donna Spencer, Jaclyn Marshall, Brady Post, Mahesh Kulakodlu, Craig Newschaffer, Taylor Dennen, Francisca Azocar, and Anjali Jain Pediatrics peds.2012-3774; published ahead of print October 21, 2013, doi:10.1542/peds.2012-3774
  2. Analysis of Chemical and Biological Features Yields Mechanistic Insights into Drug Side Effects. Miquel Duran-Frigola, Patrick Aloy. Chemistry & Biology – 18 April 2013 (Vol. 20, Issue 4, pp. 594-603)
  3. Estudios de seguridad de medicamentos: Métodos para detectar las reacciones adversas y valoración de la relación causa-efecto. Juan A. Armijo, Mario González Ruiz 2006
  4. Riesgos y Beneficios de la medicación antipsicótica moderna en Niños y Adolescentes: Lo que ya sabemos y Lo que necesitamos saber. Dr. Celso Arango, MD, Ph.D., Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Departamento de Psiquiatría, Madrid, España (2008)
  5. Efectos secundarios del tratamiento antipsicótico en niños y adolescentes naïve o quasi-naïve: diseño de un protocolo de seguimiento y resultados basales. Jessica Merchán-Naranjo et al. Revista de Psiquiatría y Salud Mental. Vol. 05. Núm. 04. Octubre 2012 – Diciembre 2012 doi: 10.1016/j.rpsm.2012.03.006

Descubre más desde Autismo Diario

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

22 comentarios en «Antipsicóticos y Autismo: ¿Medicamos por protocolo o necesidad?»

  1. A mi hijo no le recetaron ningun medicamento cuando lo diagnosticaron como autista debido a que es un niño dulce y tranquilo, pero de pronto comenzo a halarse el pelo y pelizcarse, asi que le recetaron carbamazepina y risperin, con ello vi que el parecia un zombi que se autoagredia y le quite la medicacion en contra del neurologo, Le hice un tratamiento a base de jugos de verduras y quedo tranquilo. Yo creo que todo cambio de conducta tiene un problema o enfermedad fisica y no se quita con antipsicoticos sino con su medicacion respectiva, Mi hijo no habla asi que uso la autoagresion para comunicar que no se sentia bien, pienso que primero deberia el medico buscar la causa o enfermedad y si no encuentra nada recien medicar antipsicoticos.

    Responder
  2. Hola: tengo mi hijo de 9 años, que toma Risperidona desde hace 2 años, con moficicación, de dosis, ahora su neuróloga le receto 1.5a la mañana, 1.5 a la tarde y 0.5 a la noche conjuntamente con melatonina 3 mg, ésta última si lo hace dormir bien, pero no vemos que la Risperidona le haga algo, es más se sigue enojando igual y haciendo berrinches pese a la medicación, como hago para sacarsela, tampoco quiero hacerlo de prerpo y que le haga peor.

    Responder
  3. Yo siempre he pensado que medicar a mi hijo de 8 años el cual está dentro del TEA con risperidona para controlar el TDAH nos iba a ayudar, en cambio mi esposo siempre se a opuesto y mas aún que cuando probamos con la medicación y no hubo mayor diferencia, y se opuso mas aún, ( y eso que probamos por casi 4 años) ahora el ya casi 1 año o quizá meses más, no está tomando la medicina, yo igual pienso que no tomar algo que le pueda ayudar a mejorar, es como saber que tienes cáncer y no hacer nada para mejorarse o curarse, me gustaría saber mas claramente que hacer, porque mientras los científicos no se pongan de acuerdo con medicar o no, creo que el que padece los transtornos de sueño, hiperactividad o poca concentración para aprender, aunque sea lo mas mínimo son nuestros hijos y con ellos nosotros como padres que siempre estaremos buscando alguna forma de ayudarlos a mejorar en su vida.

    Responder
  4. tengo un hijo de 23 años , con tgd, de espectro autista, al colegio de autista que concurria no estaba permitido la medicacion, asi la fuimos llevando hasta mas o menos los doce años, cuando comenzo con conductas violentas , pelliscones, morderuras, tirones muy fuertes de cabello, se auto agredia, asi que comenze con la medicacion, la medicacion fue variando con el correr de los años y su patologia tambie, el aparte es epilectico, yo hoy por hoy, y despues de haber pasados por todos los estados posibles, pienso, que todo depende del grado de autismo que tenga cada niño, no se si en realidad se rige por grado pero es una forma de decir, mi hijo en una etapa d ela vida , en su adolescencia entre los 15 a los 19, estuvo muy violento, pero mucho, osea no habia ninguna otra opccion, consulte con varios psiquiatras grado cinco y todos coincidieron en que habia que medicarlo fuertemente, porque se ponia en riesgo el, y a las demas personas, y asi fue, ha mejorado notoriamente, eso no quiere decir que tengo malos dias, o ratos malos pero al menos las agrecciones han disminuido, yo pienso que eso va en cada familia, obvio que las medicaciones tienen vcontraindicaciones, pero se puede vivir con una persona que se golpea o golpea al que esta al lado? yo creo que uno debe ver lo que es mejor para el, y p ara la familia, yo prefiero medicado en casa, que en una clinica, tambien creo que el teorico es mucho mas facil practico. matias toma clozapina un medicamento fuerte y controlado por sangre todos los meses, y eso no dio un poco de paz, no esta tan bien como al principio porque obviamente el organismo va adaptandose a la medicadion y va perdiendo efecto, pero hasta ahora, es lo unico que encontre….no es facil, cada uno debera considerar su caso, y entiendo que cuando el era chiquito pensaba igual que las mamas que ahora tienen hijos chicos, pero luego la realidad te va haciendo cambiar de parecer. yo quiero a mi hijo en mi casa, y si a de ser medicado asi sera……. respecto todas la opiniones claro esta. .SALUDOS GRACIELA

    Responder
    • No entiendo lo de que no estuviera permitida la medicación en la escuela, es decir, ellos no le daban la medicación u os exigían que no le dierais vosotros la medicación al niño?

      En nuestro caso toma medicación desde los 3 años y tiene ahora casi 5. A día de hoy puedo afirmar, al menos en nuestro caso, que la medicación ha sido un acierto.

      Responder
  5. Mi hijo tiene 19 años.Pasó por la fenobarbital para controlar las crisis febriles,nada.Luego acido valproico,risperidona en gotas y en pastillas.Lleva unas 3 semanas sin medicación y aunque lo noto igual en sus ecolalias e interese obsesivos,le cuesta dormirse.Anoche estuvo despierto hasta las 2 y tantas….Vamos a ver como dijo el médico.Si tiene un severo retraso en autoagredirse o ecolalias y/o hiperactividad,volvemos a usarlas y control en 3 meses.Sino,seguir sin el medicamento y control en 6 meses.Veremos…Se los riesgos,pero lo hago por su bien y espero no equivocarme.===

    Responder
  6. Mi hijo,va a cumplir nueve, tiene autismo típico y apenas comenzamos a medicamedicarlo hace un poco más de un mes, nosotros nunca habíamos querido hacerlo antes, pero estábamos muy cansados de su hiperactividad y manías como escupir constantemente y picarse un ojo…la verdad, no he notado cambios en mi niño, solo duerme un poco mejor, pero no me parece suficiente beneficio, en relación al riesgo…

    Responder
    • Cada niño es un mundo, pero de todas formas todavía es muy pronto. Piensa que además hay que encontrar la dosis correcta para el. Mi hijo con 4 años toma 0,5 a la mañana, 0,5 al mediodía y 0,5 a la noche. Llevamos un año regulándole la dosis, y a pesar de que no estábamos a favor, decidimos hacerlo por su bien. El cambio ha sido increíble.

      Lo único que te recomiendo es que no se lo quites por tu cuenta, que lo que hagas sea siempre de la mano del especialista.

      Saludos

      Responder
  7. Mal diagnosticado por psiquiatria ” psicosis infantil ” a sus escasos 2 años 11 meses o menos , un poquito menos ,Siendo el portador de T.G.D. no especificado diagnosticado por psicologia a la edad de 10 años aproximadamente, epileptico y con un R. M. mi hijo fuè medicado con haloperidol en sus diversos nombres comerciales, sus caracterìsticas : falta de lenguaje verbal, caminar en puntas de piè, aleteo de manos, entablar mirada con el interlocutor, ausencias, falta de juego simbolico ya presente a esa edad, Berrinches : quedarse solo en pañales frìo o calor, limpiar la mesa de juguetes de un manotazo,llanto sin lagrimas, autoagreson ( hasta ese momento nunca agresion a terceros ni siquiera estiron de pelo) , la palma de la mano llegando a tener callosidades, sin distinguir el limon de la miel. camino a los 18 meses con ayuda pero de un solo dia. Actualmente tiene 27 años, su agresividad es producto del ambiente y se manifesto a los 14 años, ( papà alcoholico y agresivo ) su socializacion es limitada, su lenguaje es màs gestual que verbal, agresivo- impulsivo , queriendo modificar la opinion de los demas a golpes , autoagresion, Hasta hoy con antisicoticos en un momento dado combinaban risperidona 3 mg. con haloperidol depòsito ( inyectable ) llegando a inyectarle 2 veces al mes. Es increible coo una vez que descarga su ira el cambia su conducta y se vuelve un chico cariñoso, Soy lic. en psicopedagogia con estudios superiores de pedagogia a nivel universitario en primer termino y de psicologia anteriores a la lic. en Psicopedagogia, soy la mamà , y me cuesta muchisimo manejarlo cuando està en ese estado, los golpes que me propina son tremendos. Producto de los antisicoticos innecesarios a edad temprana quizàs.

    Responder
    • Hola María Elodia. Lamento tu mala experiencia. En nuestro caso la risperidona fue una brisa de aire fresco. Suena muy teatral, pero es así. La medicación lo ha cambiado completamente: se redujeron las autolesiones, comenzó a formar sus propias frases (hasta ahí todo era ecolalia), duerme por las noches… no digo que la medicación se la solución para todo, pero al menos le permite estar más tranquilo y receptivo a la terapia y el día a día, y eso ya es mucho.

      Responder
  8. Creo que cada niño con TEA es cada niño con TEA. No se puede generalizar ni en favor, ni en contra de los fármacos, cada caso se aborda en su absoluta individualidad.

    Algunos necesitan tratamientos farmacológicos relativamente permanentes, otros temporalmente y otros no lo necesitan.

    La experiencia que tengan unos no necesariamente aplica para otros.

    Lo importante es el uso de los fármacos asociados a otras intervenciones y no basar el tratamiento en el hecho de administrar un medicamento de cualquier tipo.

    Responder
  9. Los padres nos enfrentamos a tomar decisiones como la de administrar o no fármacos a nuestros hijos… Pero en especial yo tengo una misión con mi hijo: FORMARLO INDEPENDIENTE… Formarlo para mi también implica tomar riesgos calculadosde lo que su neurólogos nosotros creemos que le conviene. El tiene TGD NE y TDAH diagnosticado desde que tenía 3 años… A nosotros la risperidona nos cambió la vida, de un día para el otro El Niño empezó a ver a los demas, a convivir y a desarrollarse como sus hermanos. Actualmente tiene 10, lo sigue tomando en una dosis estable, le monitoreamos riñones, sangre, peso y vamos bien…. Pero sobre todo… Va en una escuela tradicional con casi 30 niños en su salon, es cinta roja avanzada en Tae Kwon do, es buenísimo para la música, lleva calificaciones muy buenas en el colegio y lo mas padre es que ha pertenecido el año pasado a la a selección de basquetbol y este a la de fútbol. Que sí se comporta como los demas? No… Pero ha ido aprendiendo a desarrollarse bien el solo en el medio que lo rodea, ahi es uno mas y aunque lo apoyan cuando algo no le sale bien, a palabras del psicólogo escolar, ha ido presentado muchos menos episodios de lo que esperaban…
    No estamos hipnotizados a los medicamentos, hemos pasados por varios que no nos ayudaron, incluso al revés, actualmente está con risperidona y concerta solo cuando va a clase, y acabamos de iniciar una propuesta que nos dan de darle Omega 3… Muy temprano para saber si funciono, pero todo este rollo es para expresarles que sin la medicación adecuada en el momento adecuado, las perspectivas de mi hijo serían mucho mas limitadas, y gracias a Dios en el camino hemos ido encontrando los modos y las vías… Como padres nos queda estudiarle bien, analizar y tomar decisiones por ellos, y hasta el momento, medicarlo ha sido una muy importante sin la que no estaríamos donde estamos. Saludos y ánimo a todos… Pasar por aqui y leer ya es parte del camino…

    Responder
  10. A mi hijo tambien le doy medicamentos y por supuesto que dan miedo los riesgos secundarios, pero al ver que lo ayuda a sentirse bien, verlo mas relajado y libre, aprendiendo a vivir en sociedad y a comunicarse, hemos decidido seguir adelante, ya que de pequeño el estres y la ansiedad lo tenian esclavizado y su impotencia lo hacia reaccionar negativamente…todos son casos singulares y qué bueno por los que pueden estar sin medicamento, ahora mi hijo tiene 8 años y no ha dejado de avanzar favorablemente, porque su estado de salud tambien mejoro mucho debido a su bienestar emocional, el proposito es ayudarlo a adaptarse a la vida cotidiana lo mejor posible, enseñarle que hay cambios inesperados y que no todo son rutinas y que las cosas no se logran gritando o pataleando y vamos por muy buen camino.. ,

    Responder
  11. A mi hijo Miguel de 11 años de edad le recetaron “seroque” tabletas de 100 mg, los efectos secundaria se vieron inmediatos, estreñimiento, comezón en las encías, alta temperatura, al grado de entrar en la regadera y mojarse con agua fría, lo peor fue un dia en la noche que le di el medicamento y comenzó a asfixiarse, su doctora nunca me advirtió de estos efectos y cuando la visité solo se limitó a decirme que no había sido el medicamento y que solo tenia dos opciones, darle de nuevo el medicamento y si se asfixiaba de nuevo que lo suspendiera, o quitárselo y atenerme a las consecuencias de que el se agrediera otra vez y no durmiera, y esperar hasta mi cita q era una semana después que al fin de cuentas era mi decisión, que falta de profesionalismo y ética.
    Obviamente ingrese una queja al hospital.

    Responder
  12. Mi niño a estado con risperidona en gotas y con arteterapia y ejercicio y la dosis se ha mantenido estable, el tiene 5 años y medio y el medicamento realmente hace una gran diferencia positiva en el. Mi esposo y yo estabamos reacios a utilizar el farmaco pero despues de ver que el esta bien y aprendiendo en la escuela y sociabilizando noss convencimos de su uso. el poder verlo en paz y disfrutando de lo que lo rodea ha sido maravilloso.

    Responder
  13. Comparto el comentario en el cual no se le debe administrar fármacos a los niños con Autismo, por experiencia yo le administraba Tegratol y Holoperidol ha mi niño de 5 años y se estaba haciendo dependiente de esta medicina por que cuando no le daba se ponía agresivo y no podía dormir, pero lo lleve a un especialista Neuropediatra y le quito dicho medicamento al inicio fue algo difícil de controlar pero al cabo de 15 días aproximadamente pude controlarlo llevándolo por las tardes al parque y realizando actividades de juego y aprendizaje en casa , y hoy en día hace su vida normal sin ningún medicamento

    Responder
  14. Mi hijo toma risperidona desde los 5 anos tiene casi 10 anos el tema es que no hemos logrado controlar la agresividad totalmente, tamb toma acido valproico, valcote, 1000 por día, es muy duro ver,, q no mejora, y en especial las crisis generalmente asociadas a las obsesiones, si tienen alguna sugerencia para ayudarlo, muchas gracias saludos desde Uruguay Florencia

    Responder
  15. Qué hace un niño de tres años tomando Risperdal por ejemplo. Incluso la misma empresa farmacéutica en el folleto adjunto al medicamento contraindica su uso en menores de quince años.
    A su vez el neurólogo indica una dosis experimental que pone a consideración de quien lo suministra (papá o mamá) basado en cómo vea al niño: muy “dormido” le bajas la dosis o si se torna hiperactivo pues que se la aumentas y nos veremos en un par de meses.
    Y es que medicar se volvió tan automático que ni nos preguntan a los padres si queremos hacerlo y peor aún sin mirar antecedentes del paciente.

    Responder
    • Angelaco, es muy fácil ver los toros desde la barrera. Mi hijo lleva tomando risperidal desde los 3 años y tiene 4. Mientras le vaya bien y lo necesite lo seguirá tomando. Como madre estoy informada de los riesgos existentes, pero en este caso pueden más los beneficios.

      Mi hijo empezó con atención temprana desde los 6 meses de nacido 2 veces a la semana, en sesiones de 45 minutos, aparte trabajamos con el en casa, en el colegio está con un profe de pt 8 horas semanales, neuropediatra, psiquiatra, especialistas varios…

      La medicación le ha ayudado a hablar, a estar más receptivo con las terapias y el día a día… es un niño diferente, sin ojeras, por que apenas dormía, con crisis contínuas, autolesiones, poca tolerancia al tacto, a la frustración y al ruído.

      La medicación no es la solución por si sola, pero actúa como complemento en determinados casos. No se a que tipo de especialistas estás acostumbrada tu, pero en nuestro caso ni nos obligaron ni nada, se comentó como una opción para ayudarle un poco y 6 meses después fue cuando se lo dimos.

      Mi hijo tiene TEA y TDAH y como madre apoyo que en los casos que sea estrictamente necesario se suministren medicamentos.

      Responder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Descubre más desde Autismo Diario

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo

×